Que razón tenía
la pena traidora
que el niño sufriera
por La Salvaora,
diecisiete años
tiene mi criatura
y yo no me extraño
de tanta locura.
Eres tan hermosa
como el firmamento,
lástima que tengas
malos pensamientos.
Quién te puso Salvaora
que poco te conocía,
él que de ti se enamora
se pierde de pa' toa' la vía'.
Tengo a mi niño embrujao'
por culpa de tu querer,
si yo no fuera casao'
contigo me iba a perder.
¡Dios mío, que pena más grande, el alma me llora!
Haber cuando suena la hora
que las intenciones se le vuelvan buenas a La Salvaora.
No hay comentarios:
Publicar un comentario